La
hibris (en
griego antiguo ὕβρις
hýbris) es un concepto griego que puede traducirse como ‘desmesura’. No hace referencia a un impulso irracional y desequilibrado, sino a un intento de transgresión de los límites impuestos por los
dioses a los hombres mortales y terrenales. En la
Antigua Grecia aludía a un desprecio temerario hacia el espacio personal ajeno unido a la falta de control sobre los propios impulsos, siendo un sentimiento violento inspirado por las pasiones exageradas, consideradas enfermedades por su carácter irracional y desequilibrado, y más concretamente por
Ate (la furia o el orgullo). Como reza el famoso proverbio antiguo, erróneamente atribuido a
Eurípides: «Aquel a quien los dioses quieren destruir, primero lo vuelven loco».