Los
palillos, un
par de pequeños palos rectos de similar longitud, son los utensilios tradicionales usados para comer en
Extremo Oriente (
China,
Japón,
Corea del Norte,
Corea del Sur y
Vietnam), así como en
Tailandia, donde están limitados sólo a las sopas y los fideos desde que el rey
Rama V introdujera en
siglo XIX los utensilios occidentales. Los palillos se fabrican normalmente de
madera,
bambú,
metal,
hueso,
marfil y actualmente también de
plástico. En el palacio imperial chino se usaban palillos de
plata para detectar veneno en las comidas reales.