Se denomina
pecio (del latín posclásico,
pecia o
petia, o en bajo latín
pecium o
petium, ‘fragmento o pieza rota’) a los restos de un artefacto o nave fabricado por el ser humano, hundido total o parcialmente en una masa de agua (
mar,
río,
lago,
embalse...). Un pecio puede ser producto de un accidente marítimo,
naufragio o catástrofe natural, pero también puede ser ocasionado por abandono, hundimiento intencional, descuidos o negligencias.