En la
mitología griega,
Pegaso (en
griego, Πήγασος) era un
caballo alado. Pegaso fue el primer caballo que llegó a estar entre los dioses. Pegaso era el caballo de
Zeus, dios del Cielo y de la Tierra. Pegaso nació del chorro de sangre que brotó cuando
Perseo cortó la cabeza a
Medusa. Ésta era una de las tres hermanas
Gorgonas: las otras eran
Esteno y
Euríale. Suele representarse en blanco o negro y tiene dos alas que le permiten volar. Una característica de su vuelo es que cuando lo realiza, mueve las patas como si en realidad estuviera corriendo por el aire.