El , dentro de la
historia japonesa, abarca los años
710 hasta el
794 y sucedió al
período Asuka. Se inicia cuando la
Emperatriz Genmei estableció la capital del país en el palacio de
Heijō-kyō, en la actual ciudad de
Nara. A excepción de cinco años (entre el 740 y 745), cuando la capital se trasladó nuevamente, permaneció como el centro de la civilización japonesa hasta que el emperador
Kanmu estableció una nueva capital en Nagaoka-kyō (
Nagaoka) en 794 y se iniciaría el
período Heian.