Los
piroxenos son un importante grupo de
silicatos que forman parte de muchas rocas
ígneas y
metamórficas. Su nombre proviene de las palabas "piro" y "xeno" del
griego antiguo que significan "fuego" y "extraño". Este nombre se lo dio
René Just Haüy debido a que este consideraba su ocurrencia en
lavas como algo ajeno.