El
primer franquismo (1939-1959) fue la primera gran etapa de la historia de la
Dictadura del general Franco comprendida entre el final de la
Guerra Civil Española y el abandono de la política
autárquica con la aplicación del
Plan de Estabilización de 1959, que dio paso al franquismo desarrollista o
segundo franquismo que duró hasta la muerte del
Generalísimo. Se suele dividir en tres subetapas: la primera de 1939 a 1945 que se corresponde con la
Segunda Guerra Mundial y durante la cual el régimen franquista experimentó un proceso de fascistización ya iniciado durante la guerra civil para asemejarse a la
Alemania nazi y, sobre todo, a la
Italia fascista y que se vio abortado por la derrota de las
potencias del Eje; la segunda subetapa, de 1945 a 1950, constituyó el período más crítico de la historia de la dictadura franquista a causa del aislamiento internacional al que fue sometido y a la ofensiva de la oposición, pero los cambios «cosméticos» que introdujo y sobre todo el estallido de la
guerra fría acabó reintegrándolo al bloque occidental anticomunista; la tercera etapa, de 1951 a 1959, ha sido llamada también el
decenio bisagra por constituir una época intermedia entre estancamiento de los «
autárquicos»
años 1940 y la «desarrollista» de los
años 1960, y que también ha sido caracterizada como la época del «esplendor del
nacional-catolicismo».