El
agua (del
latín aqua) es una
sustancia cuya
molécula está formada por dos
átomos de
hidrógeno y uno de
oxígeno (H
2O). Es esencial para la supervivencia de todas las formas conocidas de
vida. El término agua generalmente se refiere a la sustancia en su
estado líquido, aunque la misma puede hallarse en su forma
sólida llamada
hielo, y en su forma
gaseosa denominada
vapor. El agua cubre el 71 % de la superficie de la
corteza terrestre. Se localiza principalmente en los
océanos, donde se concentra el 96,5 % del agua total, los
glaciares y casquetes polares poseen el 1,74 %, los depósitos subterráneos (
acuíferos), los
permafrost y los glaciares continentales son el 1,72 % y el restante 0,04 % se reparte en orden decreciente entre lagos, humedad del suelo, atmósfera, embalses, ríos y seres vivos. El agua es un elemento común constituyente y que pertenece al
sistema solar, hecho confirmado en descubrimientos recientes. Puede encontrarse, principalmente, en forma de hielo; de hecho, es el material base de los
cometas y el vapor que compone sus colas.