El término
Tercer mundo fue acuñado por el
economista francés Alfred Sauvy en 1952, realizando un paralelismo con el término francés
Tercer Estado, para designar a los
países que no pertenecían a ninguno de los dos bloques que estaban enfrentados en la
Guerra Fría, el
bloque occidental (
Estados Unidos,
Europa Occidental,
Japón,
Canadá,
Corea del Sur,
Australia,
Nueva Zelanda y sus aliados) y el
bloque comunista (
Unión Soviética,
Europa Oriental,
China). Actualmente, de manera anacrónica (el «segundo mundo» del «bloque socialista» ha desaparecido como concepto), el término se utiliza, de manera poco precisa, para referirse a los países
periféricos subdesarrollados o «
en vías de desarrollo», en contraste a los
países desarrollados; en este último sentido actual, el término se emplea a veces para referirse en bloque a todos los países no desarrollados, y en ocasiones, para referirse sólo a los que registran los peores índices de desarrollo de gran atraso económico-social, como el
analfabetismo, el
hambre, las carencias hospitalarias y de
salud pública, las viviendas y servicios sanitarios precarios, una escasa expectativa de vida, etc. Según la RAE, el Tercer Mundo es el conjunto de países menos desarrollados económica y socialmente.